Organización y productividad para emprendedores
Sabemos muy bien que iniciar un negocio no puede ser del todo fácil, más aún si nunca hemos iniciado uno en nuestra vida. También debemos tener en cuenta factores que pueden interferir en el crecimiento de nuestro reciente negocio, como el hecho de que ya no estamos en los 90 o en los años 2000, donde emprender era difícil porque tenías que llegar a más personas a través de medios ya arcaicos, pero en esos tiempos era lo que teníamos.
Pero bien, no importa el tiempo en el que estemos ni las herramientas que tengamos a mano; hay algo muy importante que muchos no tomamos en consideración, y es el tema del que hablaremos brevemente el día de hoy: LA ORGANIZACIÓN Y PRODUCTIVIDAD.
Cuando hablamos de organización, creo que a muchos nos toma por sorpresa, porque, ¿de qué sirve ser organizado si tengo un producto que se vende con facilidad? ‘Va, el solo se vende’ , dirán algunos, pero no es así. Un gran poder conlleva una gran responsabilidad… alto… no es una película de acción… Pero sí es el comienzo de nuestra aventura como empresarios, y si queremos que todo salga bien, tenemos que empezar por organizar nuestra empresa para comenzar a disfrutar de ganancias… alto de nuevo.
Es muy claro que cuando nos organizamos iniciamos con pie derecho pero ahora biene la productividad.
Con la productividad encontraremos los objetivos propuestos y las metas más definidas en los tiempos propuestos. No podemos dejar de lado este punto tan importante, ya que las ventas o nuevos pedidos no caerán del cielo. Cuando tengamos nuevos pedidos, debemos cumplir con los tiempos predeterminados para poder afianzar a nuestros nuevos clientes y fidelizar a los clientes ya antiguos.
Es por eso que aquí te dejamos unos consejos, con los cuales te podrás guiar para mantener una organización y una productividad implacable.
1. Establece Metas Claras y Prioridades: Antes de comenzar tu día, tómate un tiempo para definir tus objetivos principales y las tareas más importantes que debes realizar. Prioriza estas tareas en función de su urgencia e importancia. Utiliza herramientas como listas de tareas pendientes o aplicaciones de gestión de proyectos para mantener un registro organizado de tus objetivos y progresos.
2. Implementa Rutinas y Horarios: Establece rutinas diarias y horarios específicos para diferentes actividades. Esto ayuda a crear estructura y disciplina en tu día, lo que puede aumentar tu eficiencia y reducir la procrastinación. Bloquea períodos de tiempo dedicados a tareas específicas, como responder correos electrónicos, trabajar en proyectos importantes o participar en actividades de desarrollo personal.
3. Elimina las Distracciones: Identifica y elimina las distracciones que puedan obstaculizar tu productividad. Esto podría incluir notificaciones de redes sociales, correos electrónicos no urgentes o reuniones innecesarias. Considera utilizar técnicas como la técnica Pomodoro, donde trabajas en bloques de tiempo enfocados seguidos de cortos descansos, para mantener tu enfoque y concentración.
4. Delega y Automatiza Tareas: Reconoce que no puedes hacerlo todo tú solo y delega tareas cuando sea posible. Identifica las actividades que pueden ser realizadas por otros y asigna responsabilidades según las fortalezas y habilidades de tu equipo o colaboradores. Además, aprovecha herramientas y tecnologías de automatización para simplificar procesos repetitivos y ahorrar tiempo.
5. Revisa y Ajusta Constantemente: Dedica tiempo regularmente para revisar tu progreso y ajustar tus estrategias según sea necesario. Evalúa qué métodos y técnicas de organización y productividad están funcionando mejor para ti y haz los cambios pertinentes para optimizar tu eficiencia. Mantén una mentalidad de mejora continua y busca oportunidades para aprender y crecer en tu enfoque de trabajo.
Juan E. Morales
Apasionado por los negocios en internet, diseñador web y con afinidad a la tecnologia wordpress desde sus inicios